miércoles, 9 de septiembre de 2009

Zamora-Aedódromo de Coreses-Zamora

-Recorrido: Zamora-Aedódromo de Coreses-Zamora

-Km: 28, 74

-Vel.media: 15.11

-Vel.máxima: 47, 42


Una marcha que a mi, personalmente, me ha gustado mucho. Hemos salido cinco, aunque nos quedamos en cuatro, ya que uno, por lesión, tuvo que darse la vuelta en un camino. A la ida al aedçodromo de Coreses apenas ha habido carretera, aunque algo ha habido, con una cuesta de un nueve por ciento, en la que quedé segundo, nada más y nada menos detrás de uno que había competido. Luego, en la bajda (si aquello se le puede consiedar bajada) intenté ponerme en cabeza y lo conseguí, y fue fácil. Luego, de nuevo a caminos. He llevado la bici de mi padre, y en más de una ocasión he estado a punto de caerme, ya que ha habido mucha arena, como esa que hay en la playa, con tanta profundidad. Una vez, metí plato pequeño y fuí bien, pero, en otra ocasión, no me "escoñé" de milagro. La bici se me paró y, además, se me fue para un lado. Después, iba mirando para un lado. Noté que la bici botaba mucho, y miré al suelo: ¡estaba lleno de piedras!. Nada más mirar, vi un pedazo piedra con una pedazo punta que miraba hacia arriba. La pillé con la rueda de adelante, y no me caí también de milagro. Después, ya vieniendo a Zamora, fue bastante carretera. Pues ala, plato grande y piñón de los del medio. Pim, pam, pim, pam, ala, a sprintar. Como los demá andaban más que yo, fui el último, pero, al final, en el último sprint, se lo pagué a los otros tres. Pues así fuimos hasta el carril bici. Allí, nada más meternos, me escapé. En el último tramo, me cogieron y nos pusimos a sprintar. Me puse segundo, ya que, evidentemente, uno me pasó. Esa persona dejó de dar pedales y la pasé, bajé tres piñones, y con el plato mediano, conseguí alzarme con la victoria del sprint final. Lo máximo que alacanzé fue de 40 km/h. Una cosa muy fuena fueron las pulsaciones. Hubo un momento que tan pronto tenía 190 como tenía 105. No es que mi corazón esté mal, yo tengo un corazón bastante bueno, sino que al pulsómetro le hacía interferencia otro pulsómetros, seguramente el de mi padre.

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