domingo, 28 de abril de 2013

Zamora-Algodre-Monfarracinos-Zamora

-Recorrido: Zamora-Algodre-Monfarracinos-Zamora

-km: 54,70

-Tiempo: 3h10'38

-Vel. media: 17,21 km/h

-Vel. máxima: 41,10 km/h

-Puls. medias: 138

-Puls. máximas: 207

-Kcal: 1529

Hoy hemos salido con el grupo de las 9:30 de Bicizamora dispuestos a acumular unos cuantos kilómetros por algunos de los caminos de la provincia. A la hora prevista estábamos en el lugar habitual de salida. Coincidimos allí, como es habitual, con otro grupo de aficionados a la bicicleta, pero ellos son de carretera. Entre ellos estaba Jaime Rosón, el corredor zamorano del Caja Rural.Tras hinchar las ruedas y ver que ya no iba a llegar nadie, arrancamos. Enseguida aparecieron los primeros caminos dirección a Algodre, pero que no presentaron grandes dificultades, quitando algún tramo en el que tocaba agarrarse bien fuerte al manillar y, en la medida de lo posible, mantener la línea recta, algo un poco complicado. Seguimos avanzando rodando a un paso agradable. Una vez que pasamos Coreses había un repecho que causó estragos entre todos los que estábamos allí. ¿Cómo puede empinarse tanto un camino? Tiramos hacia Fausto, Adolfo, mi padre y yo. Fuimos quedándonos poco a poco. Mi padre fue el último en enganchar con nostros, pero nos fundió igualmente. Adolfo y Fuasto venían un poquito rezagados y yo ya estaba a punto de reventar, llevaba 170 pulsaciones. ¡Qué infierno! Cuando me cogió mi padre le dije: "Tira tu, como tense yo ahora no llego al final". Por fin llegamos arriba, nos dimos la vuelta para no para de golpe y empezamos a ir en contra del grupo. Mi padre llegó bastante abajo a dar la vuelta, yo cuando pasaron todos me di la vuelta y volví a subir, pero como no podía arrancar, opté por bajarme de la bici y echar a correr. Una vez reagrupados, seguimos rodando un poquito, aún en cuesta arriba, paramos a comer la barrita, bajamos un poco y enganchamos con otro camino para seguir rodando. A la vuelta tuvimos algún pique Molina, Paco y yo en una cuesta arriba....  Mientras volvíamos rodando a Zamora, tuve un par de enganchones con el manillar que casi me mandan al suelo. El primero fue con Adolfo, íbamos rodando en paralelo por un camino, quizá algo pegados. En una maniobra de los dos por intentar evitar un agujero, nos enganchamos con nuestros manillares... Vaya susto, estuvimos a punto de pegar un buen costalazo. La segunda fue con Pedro, yo iba muy pegado y le toqué en una pierna, me hizo un extraño la bici (me fuí de cuneta a cueneta unas cuantas veces), pero todo se quedó en un susto. Menos mal...

martes, 23 de abril de 2013

Zamora-Cubillos-Moreruela-Torres del Carrizal-Cerecinos-Aspariegos-Zamora

21/04/2013
-Recorrido: Zamora-Cubillos-Moreruela-Torres del Carrizal-Cerecinos-Aspariegos-Zamora
 
-Km: 63,50
 
-Tiempo: 2h38'44"
 
-Vel. media: 24,00 km/h
 
-Puls. medias: 136
 
-Kcal: 1286
 
El domingo salimos con la bici de montaña, aunque la ruta que hicimos fue íntegra por asfalto. La idea era otra, irnos a Almaraz, Villaseco, Valdeperdices y Zamora, pero el viento venía de otro lado, así que a última hora cambiamos la ruta a hacer. Hicimos casi tres kilómetros hasta que conseguimos salir por completo de Zamora. Luego ya nos pusimos a rodar camino de Cubillos con el aire en contra, que nos acompañaría durante una buena parte de la ruta. Me puse yo delante y mi padre a ruta durante estos kilómetros que el aire nos pegaba en contra, así que poco hablamos y los piques fueron mínimos, reservándolos a las cuestas arriba. Una vez que ya el aire nos daba a favor empezamos a subir bien el ritmo, llegando a ver durante muchos tramos los 35 km/h, que para ir en bici de montaña ya está bien, cómo se notaba el aire. Finalmente nos pusimos entre 27 y 30 km/h y ahí nos quedamos hasta Zamora. Una vez allí alargamos por las afueras de la ciudad para llegar a los 60 kilómetros, aunque, como podéis ver, nos pasamos por más de tres kilómetros. Entramos por la zona de Valorio a la carretera de Almaraz para entrar al Puente de los Poetas y así poder alargar más. Buena salida en bici.

domingo, 14 de abril de 2013

Zamora-Corrales del Vino-Zamora

-Recorrido: Zamora-Corrales del Vino-Zamora

-Km: 48,19

-Tiempo: 2h41'48"

-Vel. media: 17,90 km/h

-Vel. máxima: 41,90 km/h

-Puls. medias: 133

-Puls. máximas: 177

Hoy he vuelto a cambiar las zapatillas por la bici, pero esta vez he salido con la de montaña. Antes de esta han tocado otras dos alidas en bici, una el Jueves Santo y otra el pasado domingo. Hoy hemos ido con el grupo de Bicizamora de las 9:30 horas. Salimos de la gasolinera de siempre para poner dirección a Corrales, donde nos esperaba Luis. Fuimos rodando a buen ritmo, alternando trozos de asfalto durante los primeros kilómetros y tramos de caminos en el resto de la ruta hasta Corrales. Mientras íbamos rodando íbamos disfrutando del buen día que hacía hoy (ya era hora) y de lo bonito que estaba el campo.
En Corrales fuimos a buscar a Luis. Y se montó. No nos acláramos por dónde teníamos que ir, tuvimos que estar callejeando hasta dar con la puerta adecuada. Una vez que todo estuvo solucionado y Luis ya estaba incorporado al grupo, seguimos rodando. Salimos del pueblo ya en dirección a Zamora, con intención de volver por la Ruta de la Plata. Tras algún tramo de carretera, enganchamos con ella. Nos encontramos con varios peregrinos que iban haciendo el Camino de Santiago. Hubo una bajada en la que nos partimos, unos tiraron para delante, otros se quedaron atrás y yo, que no sabía con quién tirar, me decidí por hacer el descenso. Pero me tocó hacerlo solo, los que iban por delante me sacaban mucha distancia para recortársela. Disfruté muchísimo bajando, me veía suelto y no duré en arriesgar algo. Éso sí, me tocó clava el freno una vez, estuve a punto de salirme del camino meterme muy fuerte en un pequeño estrechamiento del camino. Tras pasar la tierra que  había (las famosas "playas"), vuelvo a dejar que la bici caiga ya hasta el final. Allí estaban algunos compañeros, además de Fernando y Portales, que venían de frente a nosotros. Mientras venían el resto estuvimos allí hablando con ellos. Resultó que a Paco le había picado un bicho cerca del ojo y a Ángel se le había salido la rueda, a los dos en el mismo momento. Cuando ya estuvimos todos, pusimos de nuevo rumbo a Zamora rodando. Ya en el Puente de Piedra cada uno tiró para su lado. No ha habido muchas cuestas, tan solo una algo larga  donde disfruté bastante y estuve a punto de caerme en una rodera.