Zamora-Coreses-Malva-Castronuevo-Aspariegos-Benegiles-Monfarracinos-Zamora

-Recorrido: Zamora-Coreses-Malva-Castronuevo-Aspariegos-Benegiles-Monfarracinos-Zamora

-Km: 77,12

-Tiempo: 2h37'50"

-Vel. media: 29,30 km/h

-Vel. máxima: 45,40 km/h

-Puls. medias: 136

-Puls. máximas: 181

-Kcal: 1371

Ayer salimos con la bici de carretera mi padre y yo para hacernos unos cuantos kilómetros. A las 9:00 estábamos en el lugar habitual de quedada para ver si se nos apuntaba alguien a última hora. Finalmente no fue así, por lo que nos fuimos nosotros dos a dar la vuelta en bici. La idea era, como siempre, salir con el viento en contra para volver con él a favor. Empezamos a rodar a un ritmo bajo hasta que conseguimos pasar todos los semáforos. Una vez fuera de todas esas historias, pusimos rumbo a Coreses. Durante estos primeros kilómetros fuimos a u ritmo muy bueno, pero, cuando llevábamos sobre 10, empiezo a notar que la bici vibraba de atrás. Toma, pinchazo. Nos paramos y a arreglarlo. Una vez que todo estaba listo, volvemos de nuevo a dar pedales, pero nos salimos de esa carretera, pues los arcenes estaban llenos de piedrecitas pequeñas que eran un auténtico peligro para los ciclistas, sobre todo con estas cubiertas tan finitas como son las de carretera. De Coreses vamos hasta Malva. En ese tramo tenemos una cueste muy interesante. Y, claro, nos ponemos a darle bien. Recordé que Agustín en el Cross de Valorio nos iba dando cambios de ritmo, supongo que para dejarnos, así que intenté hacerlo. Vaya paliza, éso es realmente duro. Finalmente mi padre me dio caza. Llegando ya a la parte de arriba quedaba otra que apretar los dos para ver quién llegaba antes. Pues al final no sabría decir quién de los dos fue. Seguimos rodando (y recuperando) hasta Castronuevo y, de allí, poner rumbo otra vez hasta Zamora por Aspariegos, Benegiles y Monfarracinos. A falta de unos 30 kilómetros para llegar se puso mi padre a tirar. Bueno, yo ya iba bastante tostado, así que me limité a ir a su rueda hasta llegar. Miraba el pulsómetro y me marcaba 140, 150 pulsaciones. Al final, llegamos a Zamora con una media de 29,5 km/h, pero luego rodeamos y nos bajó.