Senda del Duero

-Recorrido: Senda del Duero (Peñafiel-Tudela de Duero).

-Km: 55,93

-Tiempo: 3h44'04"

-Vel. media: 14,98 km/h

-Vel. máxima: 33,10 km/h

-Puls. medias: 140

-Puls. máximas: 172

-Kcal: 1937



Hoy hemos cambiado los caminos zamoranos por los de Valladolid para hacer unos cuantos kilómetros por allí, saliendo de Peñafiel y llegando a Tudela de Duero. Hasta allí nos desplazamos 18 integrantes de Bicizamora. Una  vez que las bicis estuvieron listas y los ciclistas preparados, nos dispusimos a dar pedales por los caminos paralelos al río. La ruta tiende a ir hacia abajo, aunque, a pesar de ello, tocó dar pedales, y muchos en los casos de ciertas subidas, donde había que coger carrerilla del tramo llano o de la bajada de antes y, a base de plato pequeño y piñones de arriba, intentar subir. Había muchos tramos en los que la bajada permitía lanzarse, pero había que prestar atención también a las curvas, muy abundantes a lo largo de los casi 56 kilómetros. Durante esta ruta he disfrutado bastante, machacándome en casi todos los momentos. Cuando me quedaba entre dos grupos, aprovechaba la bajada para ir recortando algo de distancia y poder coger a los que iban delante. Mi fama de mal bajador es conocida por todos los que me acompañan en las salidas con la bici de montaña. Hoy, viendo que el suelo estaba firme, me he atrevido a arriesgar, y la verdad es que lo he disfrutado. Eso sí, me ha tocado poner pie a tierra en alguna ocasión. En un par de curvas, donde había algo de mala visibilidad, había tierra y desde la parte de arriba no se distinguía el camino, así que bajaba con intención de hacerlas para un lado cuando en realidad era para el otro, así que me tocaba clavar los frenos para poder coger bien la curva. Por el resto, solo lamentar una avería y alguna caída donde, por suerte, todo lo que nos llevamos de recuerdo fue el susto.

Actualizando salidas

31/08/13

-Recorrido: Zamora-Moraleja-Pelagonzalo-Toro-Pozoantiguo-Fresno-Zamora

-Km: 77,10

-Tiempo: 2h47'15"

-Vel. media: 27,65 km/h

-Puls. medias: 136

-Puls. máximas: 172

-Kcal: 1313

-Km: 2309,92

Alberto y mi padre observando las virtudes de las Cannondale.

El domingo pasado quedamos para salir con la bici de carretera. De Zamora salimos Alberto, Mayte, Manu, mi padre y yo en dirección a Moraleja del Vino para recoger a Bernardo y allí decidimos hacia dónde ir. Una vez que llegamos a Moraleja, con pérdida de barrita incluida por mi parte, llegamos a Moraleja. Allí estaba Bernardo. Estuvimos esperando a David y a Carlos, que era la primera vez que salía con nosotros. La idea fue la de ir hasta Toro por Peleagonzalo y de allí volver hacia Zamora por Pozoantiguo y Fresno de la Ribera, no sin antes subir hasta Toro por la zona de adoquines y tomar allí la famosa barrita. Fuimos rodando a buen ritmo, sobre todo cuando Manu se ponía en cabeza a tirar. Antes de llegar a Toro David pinchó, así que paramos a arreglar. Una vez que todo estuvo correctamente, volvimos a arrancar. En la subida de los adoquines menuda paliza para llegar hasta arriba, aquello no se daba acabado. Empezamos a subir todos juntos, pero enseguida nos fuimos separando unos de otros. Callejeamos algo, comimos, y vuelta hacia Zamora, que nos quedábamos fríos. Manu nos dejó cuando llevábamos sobre la hora y cuarto. Menuda paliza para el cuerpo.

07/09/13

-Recorrido: Zamora-Tardobispo-Fresno de Sayago-Bermillo de Sayago-Pereruela-Tardobispo-Zamora

-Km: 82,00

-Tiempo: 2h53'46"

-Vel. media: 28,31 km/h

-Vel. máxima: 61,90 km/h

Hoy otra salida en bici, esta vez Carlos, mi padre y yo. Salimos para rodar por la zona de Sayago, que hacía mucho tiempo que no íbamos. Tras salir de Zamora nos encaminamos hacia Tardobispo para ir hasta Bermillo de Sayago. El ritmo comenzó a subir hasta más o menos los 27 km/h (el cuenta no me marcaba y el GPS lo tenía programado para que me diera el ritmo por kilómetro, eso era lo que me iban "cascando" sobre la marcha). Hacía algo de fresco, lo que hizo que yo tardara algo más de lo habitual en calentar. Íbamos rodando a buenos ritmos, sin picarnos pero manteniendo una velocidad uniforme. El viento nos iba dando bastante a favor, lo que hacía que fuéramos bastante rápidos. Hasta Bermillo prácticamente no tuvimos ningún pique, fuimos hablando y pedaleando. En Bermillo paramos a tomar la barrita. Desde allí hasta Zamora nos pegaría el aire en contra. Un rato, al poco de arrancar, se me ocurrió ponerme delante con el plato metido. Si lo sé, me había quedado a rueda. Empezamos a ir a relevos de más o menos un kilómetro. En Pereruela ya decidimos que había que empezar a bajar el ritmo. ¡Vaya dolor de piernas! Desde allí hasta Zamora ya decidimos volver rodando suave, que menuda paliza llevábamos encima.